Los cirujanos también necesitan cariño...
En 1994 recibimos en el Sanatorio donde trabajaba a 2 niños, Shirly de 3 años y su hermano de 5.
Por un accidente doméstico sufrieron la semiamputación de 3 de sus manos y la amputación total de la cuarta.
Fueron traídos de Andino y luego de peregrinar por 2 hospitales concurrieron a nuestra Clínica.
Después de una larga y trabajosa cirugía de más de 15 hs. y dos equipos trabajando simultáneamente, logramos revascularizar las 4 manos.
Los niños estuvieron 1 año rehabilitando y nosotros desviviéndonos por atenderlos.
El día 8 de mayo de este año, más de 20 años después, atiendo a la paciente Shirly Marcovich
Hago la pregunta de rutina "hola que te anda pasando?"
-Nada, no me atrevía pero finalmente vengo a conocerlo, para poder cerrar mi circulo, para poder agradecerle lo que hizo por mí...
-Vos sos SHIRLY?? Y se me revelaron mil fotos instantáneas de aquel momento
Y los dos nos pusimos a llorar.
-Y tu hermano?
-Él bajo una cortina y no quiere saber nada...pero anda muy bien
Hoy Shirly está estudiando, pinta y vino a consulta con su novio.
Da la casualidad que fue justo en el día del traumatólogo.
Gracias Shirly por haberme dado esta gran emoción al venir a conocerme y sacarnos una foto juntos.
Los cirujanos también necesitamos cariño.
Miguel Slullitel
Rosario
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